domingo, junio 15, 2008

La que nunca te dirá que no

Ayer lloré toda la noche. A pesar de que fui al cine con mis amigos y miré una película divertida, no logré animarme por completo. Hice un gran esfuerzo para que las lágrimas no salieran mientras platicabamos o reíamos y solo pensaba en qué hubiera pasado si yo me hubiera dado cuenta o qué tal si yo hubiera salido y lo hubiera evitado. Hay demasiada culpa y tristeza en mi familia como para pensar ahorita en estas cosas y encontrar un culpable. Estoy deprimida y sé que es una exageración, pero el Jack está muerto y enterrado cuando apenas ayer al medio día estaba muy bien. Murió de la manera más negligente posible y hubiera preferido que lo atropellaran o envenenaran a que sufriera de esa forma.
Y lloro aún más al recordar que ni siquiera tengo una foto de él. Siempre se paraba en el lavadero para recibir una caricia y me llenaba de pelos. Le gustaba jugar a la pelota y ladrarle a todo mundo; ¿Tú perro es bien bravo verdad? Para nada, es un amor. Y lo era. Mucho.





...la que siempre
tiene listo un beso:::♪

2 comentarios:

Tapiocadas dijo...

maniana tendras otro y diras... el otro perro era mejor.

Orizschna dijo...

cuando pasa eso duele, y duele muy culero.
no se que mas decir.
besos-.